El término “colaborador” lo utilizo siempre, como un concepto referido a todos aquellos que trabajan en una organización o gobierno, sin importar su nivel jerárquico. Por lo tanto, colaborador es una persona que coopera con otra. En el ámbito de las organizaciones el término se utiliza para denominar a las personas que trabajan bajo la conducción de otra/s.
Esta definición del término implica que el número 1 de una organización, que a su vez reporta a una casa matriz, es un colaborador, lo mismo que un ministro / funcionario de alto rango lo es respecto del número 1 del gobierno.
Al igual que se dijo sobre los líderes y jefes, para ocupar sus diferentes puestos se requiere de cada colaborador ciertos conocimientos, competencias y experiencia. También, como en los casos anteriores, algunas virtudes.
En las notas LÍDERES HOY y JEFES HOY hice una mención a la relectura de los clásicos. Allí mencioné el Diccionario de Filosofía, en 4 tomos, de J. Ferrater Mora y la cita en esta obra de uno de los diálogos de Platón en el cual se presentaron las cuatro virtudes cardinales: Prudencia, Templanza, Fortaleza, Justicia.
Allí se señala que, “ninguna de las virtudes indicadas es específica, en el sentido de aplicarse sólo a una determinada actividad humana. Por otro lado, no parece que se pueda practicar ninguna de las virtudes mencionadas sin el auxilio o, cuando menos, la concurrencia de las otras; se ha hablado con frecuencia de “la unidad de las cuatro virtudes platónicas”.
En la obra mencionada se hace un análisis más completo y detallado de la cuestión. Igualmente, lo expuesto hasta aquí nos alcanza para preguntarnos ¿qué virtudes deberían guiar a los colaboradores, definidos como se expusiera al inicio de la nota, es decir, colaboradores de todos los niveles, ya sean responsables de grandes organizaciones, a cargo de jefaturas de nivel intermedio, empleados que por su rol no tienen otros a su cargo, niveles iniciales, se desempeñen en roles de gobierno nacional, estadual o la comunidad a la cual pertenecen?
De las cuatro virtudes cardinales, voy a hacer foco en una, necesaria -en mi opinión- para todos los colaboradores: Fortaleza. En este caso, el término hace referencia al coraje moral.
Como mencionamos en las notas relacionadas a esta, las virtudes, como las competencias y valores, se podrán observar en el comportamiento de los colaboradores de todos los niveles y tipo de organización o gobierno.
¿Qué implica fortaleza en el caso de los colaboradores? Se esperaría que cada uno evidencie, en todo momento, la capacidad para obrar asumiendo el punto medio en cualquier situación -entendiendo “punto medio” como vencer el temor y huir de la temeridad-. No se trata de alardes de fuerza física o de otro tipo; por el contrario, se relaciona con valores como la prudencia y la sensatez para optar por la posición intermedia, en distintas circunstancias.
Los conceptos involucrados en la frase del párrafo anterior enuncian un conjunto de expectativas que no siempre se cumplen, sin embargo, aún sin expresarlo, es lo que quisiéramos que suceda, en todo momento.
Llevando el tema a nuestra especialidad y como ya se ha manifestado en otras ocasiones, hemos considerado las referencias mencionadas, junto con otras, como una fuente fundamental sobre la cual se han incorporado las virtudes a los modelos de competencias en los últimos veinte años. Es decir, transformando estos conceptos en competencias para que estos principios puedan ser operacionalizados y llevados a la práctica organizacional cotidiana.
Sobre la base de los libros denominados “La trilogía”, para colaboradores de distinto nivel, se esperaría que…
Implementen políticas y procedimientos organizacionales con el propósito de que el sector bajo su responsabilidad, así como todos sus integrantes obren en todo momento con fortaleza (actuar respetando el punto medio, entendiéndolo como vencer el temor y huir de la temeridad), en la consecución de los planes estratégicos.
Conduzcan y dirijan los equipos a su cargo bajo el principio definido de fortaleza, mencionado en el párrafo anterior.
Sean un referente -para otros colaboradores, jefes, compañeros, es decir, en el ámbito del área en la cual se desempeñan- en materia de fortaleza, tanto en lo personal como en relación con sus responsabilidades.
Para todas las personas / colaboradores, de todos los niveles, reflexionar sobre estas cuestiones será siempre una buena idea.
DEFINICIÓN DE LA COMPETENCIA FORTALEZA
Capacidad para obrar asumiendo el punto medio en cualquier situación. Entendiendo por punto medio vencer el temor y huir de la temeridad. No se trata de alardes de fuerza física o de otro tipo; por el contrario, se relaciona con valores como la prudencia y la sensatez para optar por la posición intermedia ante las distintas circunstancias sin caer en la tentación de actuar como todopoderoso o, por el contrario, como timorato.
Una competencia se abre en grados o niveles. La apertura en grados de esta competencia la encontrará en la obra Diccionario de competencias. La trilogía. Tomo 1.
Asimismo, para cada competencia que conforma un modelo de competencias deben elaborarse ejemplos de comportamientos observables siguiendo la misma apertura en grados o niveles utilizada en el diseño del diccionario de competencias. Ejemplos de comportamientos en relación con esta competencia los encontrará en la obra Diccionario de comportamientos. La trilogía. Tomo 2.
Por último, para todas las competencias del modelo, y con vistas a facilitar la evaluación de una persona respecto de cada competencia en particular, se sugiere la preparación de preguntas. Ejemplos de preguntas en relación con esta competencia los podrá encontrar en la obra Diccionario de preguntas. La trilogía. Tomo 3.
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